Este recurrido concepto parte del supuesto que cada causa tiene su efecto y viceversa. Si usamos este concepto, el Parque Nacional Torres del Paine ha motivado múltiples conclusiones en el último tiempo, a las que podemos denominar “causas”.
Por ejemplo, se le consideró la Octava Maravilla del Mundo (título que he se arrogan otros lugares del mundo también). Sin lugar a dudas esta es una de las “causas” que ha generado como favorable “efecto” el aumento de visitantes. Sin embargo, otros opinan que esta Octava Maravilla del Mundo está saturada, mal administrada, que la sustentabilidad y la biodiversidad están en peligro, hablan de monopolios, baja inversión, que el Estado no cumple su función etc. etc. (no quiero ser más latero). Muchas es estas opiniones tienen grandes errores conceptuales, los que deberán ser motivo de análisis en otra columna a futuro.
Pero lo cierto es que el Parque registró una baja de visitantes en Octubre de más de dos dígitos. Este es un número duro. Analizar el porqué es urgente, más si esto llegara a repetirse en los próximos meses. El “efecto” está, es la “causa” la que hay que buscar y bien podría ser que los comentarios negativos sean en parte la “causa”. ¡Y claro!, ¿Optaría un viajero por un Parque que “supuestamente” tiene todos los problemas que comentamos abiertamente?
¡Que tenemos problemas nadie lo niega!… Y de seguro los solucionaremos y aparecerán otros, que serán atendidos y solucionados, para eso existe la Administración. Si no existiesen los problemas, la administración sobraría. De hecho hay una mesa bi partita Estado – Privados trabajando en eso.
Pero la sobre reacción daña el destino. Existen canales para levantar los problemas y tenemos el don del diálogo para solucionarlos. Me permito señalar que las páginas sociales son el peor medio para denunciar cosas, sobre todo si se hace ocultándose bajo seudónimos. Si alguien pretende sostener que esto ayuda a solucionar los problemas debe a lo menos revisar su motivación, sobre todo cuando se hace sin fundamentos o con bases febles.
El Parque Nacional Torres del Paine es hoy un orgullo aún con sus falencias. Sigue siendo un destino altamente recomendable.
¡La ropa sucia lavémosla en casa!
Acá estamos todos involucrados. Satanizar al del lado para ocultar nuestras faltas es una política inadecuada que bien podría ser a lo menos parte de la “causa” del “efecto” negativo ya comentado.
Lo cierto es que Octubre bajó y ya la temporada pasada mucha gente se quejó de menor actividad en sus rubros. El efecto está claro, no sumemos más “causas” a las ya existentes para obtener “efectos” poco deseados. El Parque Nacional Torres del Paine no solo es una maravilla, es una importante fuente generadora de recursos y el sostén de muchas de nuestras familias.
Levantemos los problemas por las vías adecuadas, no nos cerremos al diálogo, dejemos de lado paradigmas y dogmas que nos hacen ver como poseedores absolutos de la verdad, más bien defendamos profesionalmente nuestras posturas pero teniendo como Norte no ganarle a la contra parte, sino solucionar los problemas.
¡Créame, el Parque se merece eso y mucho más!
Este recurrido concepto parte del supuesto que cada causa tiene su efecto y viceversa. Si usamos este concepto, el Parque Nacional Torres del Paine ha motivado múltiples conclusiones en el último tiempo, a las que podemos denominar “causas”.
Por ejemplo, se le consideró la Octava Maravilla del Mundo (título que he se arrogan otros lugares del mundo también). Sin lugar a dudas esta es una de las “causas” que ha generado como favorable “efecto” el aumento de visitantes. Sin embargo, otros opinan que esta Octava Maravilla del Mundo está saturada, mal administrada, que la sustentabilidad y la biodiversidad están en peligro, hablan de monopolios, baja inversión, que el Estado no cumple su función etc. etc. (no quiero ser más latero). Muchas es estas opiniones tienen grandes errores conceptuales, los que deberán ser motivo de análisis en otra columna a futuro.
Pero lo cierto es que el Parque registró una baja de visitantes en Octubre de más de dos dígitos. Este es un número duro. Analizar el porqué es urgente, más si esto llegara a repetirse en los próximos meses. El “efecto” está, es la “causa” la que hay que buscar y bien podría ser que los comentarios negativos sean en parte la “causa”. ¡Y claro!, ¿Optaría un viajero por un Parque que “supuestamente” tiene todos los problemas que comentamos abiertamente?
¡Que tenemos problemas nadie lo niega!… Y de seguro los solucionaremos y aparecerán otros, que serán atendidos y solucionados, para eso existe la Administración. Si no existiesen los problemas, la administración sobraría. De hecho hay una mesa bi partita Estado – Privados trabajando en eso.
Pero la sobre reacción daña el destino. Existen canales para levantar los problemas y tenemos el don del diálogo para solucionarlos. Me permito señalar que las páginas sociales son el peor medio para denunciar cosas, sobre todo si se hace ocultándose bajo seudónimos. Si alguien pretende sostener que esto ayuda a solucionar los problemas debe a lo menos revisar su motivación, sobre todo cuando se hace sin fundamentos o con bases febles.
El Parque Nacional Torres del Paine es hoy un orgullo aún con sus falencias. Sigue siendo un destino altamente recomendable.
¡La ropa sucia lavémosla en casa!
Acá estamos todos involucrados. Satanizar al del lado para ocultar nuestras faltas es una política inadecuada que bien podría ser a lo menos parte de la “causa” del “efecto” negativo ya comentado.
Lo cierto es que Octubre bajó y ya la temporada pasada mucha gente se quejó de menor actividad en sus rubros. El efecto está claro, no sumemos más “causas” a las ya existentes para obtener “efectos” poco deseados. El Parque Nacional Torres del Paine no solo es una maravilla, es una importante fuente generadora de recursos y el sostén de muchas de nuestras familias.
Levantemos los problemas por las vías adecuadas, no nos cerremos al diálogo, dejemos de lado paradigmas y dogmas que nos hacen ver como poseedores absolutos de la verdad, más bien defendamos profesionalmente nuestras posturas pero teniendo como Norte no ganarle a la contra parte, sino solucionar los problemas.
¡Créame, el Parque se merece eso y mucho más!
Aleksandar Mihovilovic
Director Asociación Gremial de Hoteles y Servicios Turísticos de Torres del Paine (HYST)